Durante la primera Conferencia internacional de la Organización de Naciones Unidas, ONU, sobre el Medio Humano, celebrada en Estocolmo en 1972, se estableció el 5 de junio como el Día Mundial del Medio Ambiente. Conjuntamente, en esta conferencia se adoptó la Declaración de Estocolmo y se creó el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA. La celebración de este día en este año 2025, se centrará en la adopción de medidas para enfrentar y frenar la contaminación por plástico.
Entre el 5 y 16 de junio de 1972 los países miembros de la ONU se reúnen en Estocolmo, Suecia, para discutir por primera vez en la historia de este organismo la importancia del cuidado del medio ambiente para el desarrollo humano. Esto fue posible gracias a la iniciativa del gobierno de Suecia, el que, a través de una carta dirigida al secretario general de la ONU con fecha del 20 de mayo de 1968, solicita incluir los problemas del medio humano en el programa del período de sesiones a celebrarse a mediados de ese mismo año. Se indicaba en esta carta que los cambios provocados por el hombre en el medio natural se habían convertido en un problema urgente para los países desarrollados y los países en desarrollo, y que estos problemas solo podían resolverse mediante la cooperación internacional.
Durante esta Conferencia se adoptan importantes decisiones. La primera de ellas es la determinación de declarar el 5 de junio como día Mundial del Medio Ambiente en conmemoración de la fecha de inicio de esta cumbre internacional. Luego se adopta la Declaración de Estocolmo, un Plan de Acción y se crea el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA, cuya sede principal se encuentra hoy en Nairobi, Kenia.
La Declaración de Estocolmo que consta de 26 principios, tuvo un impacto significativo en la concienciación pública sobre la necesidad de proteger el medio ambiente, colocando “las cuestiones ambientales en el primer plano de las preocupaciones internacionales y marcó el inicio de un diálogo entre los países industrializados y en desarrollo sobre el vínculo entre el crecimiento económico, la contaminación del aire, el agua y los océanos, y el bienestar de las personas de todo el mundo”. Este instrumento fue un paso importante en el reconocimiento de la biodiversidad y el derecho humano a un medio ambiente libre de contaminación” (ONU).
Entre los principios más importantes de esta declaración se encuentran: El derecho a un medio ambiente saludable; la responsabilidad de proteger el medio ambiente; la necesidad de la cooperación internacional; y la importancia de la educación ambiental.
Conjuntamente, el Plan de Acción establecía tres tipos generales de acción: El programa global de evaluación del medio humano (Vigilancia mundial); las actividades de ordenación del medio humano; y las medidas internacionales auxiliares de la acción nacional e internacional de evaluación y ordenación. En total 113 países adoptaron la Declaración de Estocolmo y el Plan de Acción para el Medio Ambiente Humano, entre ellos nuestro país.
Para celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente, el PNUMA organiza distintos eventos a nivel global, acompañados de campañas de sensibilización temáticas y promoción de soluciones para los desafíos ambientales. Este año las actividades se centrarán en el control de uno de los mayores contaminantes del planeta: el plástico.
La degradación de este material puede tardar desde décadas hasta siglos en descomponerse por completo, una situación muy compleja si consideramos que las investigaciones científicas estiman que desde la década de 1950 se han generado más de 9 millones de toneladas de plástico, de las cuales unas 7 mil toneladas se han convertido en residuos (PNUMA). El objetivo es encontrar la forma de evitar que estos residuos lleguen al medio ambiente, donde causan grandes estragos afectando incluso la salud humana; frenar la contaminación causada por productos plásticos y que contribuyen al cambio climático; y rediseñar los productos plásticos para que tengan una mayor durabilidad (PNUMA).